Hey…tu. Si tu. ¿Quieres saber mas de la VOP? Pues entra en este link y cacharas lo que expreso históricamente en la lucha de clases cuando la dicotomía era “leninismo/fachos”

A 41 años de los sucesos de calle Alvarado: Recordar a la VOP es parte de desmitificar la historia de la UP

Imperativo según la RAE: “Que impera o manda”. Tomémoslo más como una causa y efecto pero con connotaciones de una moral, de un deber. Nos tocan a uno, les devolvemos el golpe. Sobre todo en estos tiempos en que los pacos culiaos hacen lo que quieren.

* titulo modificado. el original:

Cuando un ex ministro del interior de la DC fue asesinado de 12 balazos

enviado al mail por los loquillos de Metiendo Ruido, Escrito por Magnicidio Espinoza

La historia comienza…

En marzo de 1969, en la región chilena, se registra uno de los hechos más sangrientos durante el transcurso del gobierno democrata-cristiano de Frei padre. Específicamente en Puerto Montt, un grupo de pobladores que se habían tomado unos terrenos de la acaudalada familia de los Irigoin fueron reprimidos salvajemente. En total se registraron 9 victimas asesinadas por las fuerzas del orden de la época. Amplios grupos sindicaron como principal responsable al entonces ministro del Interior Edmundo Perez Zujovic, sin embargo no fue condenado por ningún tribunal. Pese a todo, un par de años después, la justicia llegó.

Sin duda el hecho más “espectacular” de la VOP fue el “ajusticiamiento” del ex-ministro del interior del gobierno de Eduardo Frei Montalva. El hecho tuvo su escenario histórico en pleno desarrollo de la Unidad Popular, con Allende en el poder. Las consecuencias de este atentado fueron amplias, así como las conclusiones que podemos hacer 40 años después de su ejecución. A continuación algunas notas y reflexiones sobre el hecho y la agrupación que llevó a cabo la acción.

¿Quienes eran la VOP?

Pocos grupos son tan desconocidos como la VOP (vanguardia organizada del pueblo). Seguramente esto se debió, en parte, a su corta vida (1969-1971). Sin embargo, más allá de este hecho relevante, existe otra razón. La historia de la VOP fue silenciada tanto por la derecha como por la izquierda de la época. Para ambos grupos la organización era problemática y ni siquiera organizaciones más afines como el MIR tuvieron la iniciativa de reconocer su historia.

Según el gobierno de la UP la VOP sería un grupo infiltrado por la CIA. Según la derecha de la época, la VOP sería un grupo paramilitar del propio gobierno de la Unidad Popular. Para casi todas las colectividades políticas de la época la VOP constituía un producto anómalo, una especie de organización atrofiada. Parte de esta caracterización guarda relación con el historial de robos, expropiaciones, asesinatos y acciones ilegales que llevó a cabo la VOP durante sus dos años de funcionamiento.

Pero si miramos con un poco de detenimiento la época histórica en que se desenvuelve la VOP vemos que su accionar no era tan irracional, por lo menos en teoría. En aquellos convulsos años 60 y 70, por todo el mundo se levantaban grupos anarquistas, marxistas y socialistas de carácter político-militar. Los tupamaros en la región Uruguaya, el MIL en la región Española, las Panteras Negras en USA y Acción Directa en Francia, solo por nombrar algunos. Por otro lado, la estrategia insurrecional y la guerra de guerrillas había derrocado una dictadura solo 10 años antes, en Cuba. Entonces, si lo miramos así, la VOP fue uno más de los grupos que apareció con la idea de la lucha armada en el planeta por aquellos años.

Aun así, la VOP sigue siendo una especie de caso no resuelto dentro de nuestra memoria, una pieza que no encajó ni en el discurso de la izquierda, ni en el de la derecha de aquellos años. Todo esto es más que suficiente para preguntarnos quiénes eran y qué buscaban.

Para realizar una primera aproximación podemos enumerar algunas de las características de la organización. Ella surge de ex-militantes del PC y el MIR, los cuales fueron expulsados de estas colectividades. Contiene entre sus filas a estudiantes y jóvenes marginales, es por tanto una organización pluriclasista, como la mayoría de los grupos de izquierda de la época. Sus integrantes son bastante jóvenes y no muy numerosos (en comparación al MIR, por ejemplo). Son una organización de muy corta duración, solamente 2 años. Se caracterizan por el uso de la violencia explicita en sus acciones, así como toda clase de practicas ilegales (robos, asaltos, expropiaciones, tiroteos, etc).Por otro lado, debemos enunciar que carecían de cualquier tipo de análisis teórico, al menos que se conozca. Lo único que se tiene son sus comunicados, los cuales hablan, más que otorgar reflexiones generales sobre la coyuntura política de la época, principalmente de hechos particulares relativos a sus acciones. Son, por tanto, un grupo que se conforma en base a la practica, y a la “urgencia” de la misma, descartando el trabajo teórico y el análisis acabado de la realidad que los rodeaba. A esto último debe agregarse su poca preocupación por el “trabajo de base” que tanto cuidaban los grupos de izquierda de la época, por ejemplo conexión con sindicatos, federaciones de estudiantes u otros organismos. Eso si, debe mencionarse el trabajo que comenzaron a realizar en una comunidad campesina, el cual significó un vuelco en su política, aunque en ningún caso se transformó en su prioridad.

Para seguir podemos hacer una breve cronología de su trayectoria. En 1969 se conforma la organización y rápidamente comienzan las acciones de robos y expropiaciones. Es así como el 31 de enero de 1970 matan al militante de 25 años Ismael

Villegas, el cual muere en un tiroteo con carabineros. Ese mismo año, aun bajo el gobierno de Frei, varios miembros de la organización son detenidos. El 11 de agosto la VOP realiza una acción para recuperar armas y asesinan a un policía, es el primero de varios que vendrán después. Tras ser elegido Allende, la VOP realiza otra acción de expropiación, esta vez a un banco, en donde muere otro carabinero. El MIR saca rápidamente un comunicado descolgándose de los hechos, para empezar a conformar lo que sería su estrategia de “apoyo crítico” al gobierno de la UP. A fines de los años 70, varios militantes de la VOP llegaron a un fundo en Chicauma, a las afueras de Santiago, en donde participaron en la conformación de una comunidad auto-gestionada de campesinos. En enero de 1971 Allende firma un indulto a varios militantes principalmente del MIR, y unos pocos de la VOP, la idea de Allende es hacer gestos para que estas organizaciones se unan al proyecto del gobierno popular. Sin embargo, unos días después del indulto, la VOP realiza otra acción directa de expropiación, es más, en abril de 1971 asaltan la confiteria “Don Raul” y matan a su dueño. Varios integrantes de la VOP son detenidos nuevamente, mientras las acciones no cesan.

Este es un somero repaso de la trayectoria de la organización, trayectoria que tomaría un vuelco inesperado sólo unas semanas después cuando una acción sin precedentes llenara las portadas de los diarios de la época.

El asesinato de Perez Zujovic y los sucesos de calle Alvarado

El 8 de junio de 1971 el ex ministro del interior del gobierno de Eduardo Frei, el mismo que habia dado la orden para la matanza de pobladores en pampa Irigoin, salía de su casa junto con su hija dentro de su auto. Otro vehículo lo seguía a poca distancia. De improvisto el segundo auto, mediante una maniobra, bloquea la trayectoria del ex ministro. Entonces, se baja del automovil un sujeto con una ametralladora y mediante una ráfaga de balas asesina a Perez Zujovic. Fueron 12 los disparos en el cuerpo, la muerte fue instantánea. Los individuos se dieron a la fuga en el auto que habían conseguido unas semanas antes mediante una expropiación.

Tiempo después saldría una declaración en donde la VOP declaraba que el hecho constituía “un acto de justicia que llena de alegría el corazón de nuestro pueblo” para después declarar contra el gobierno de la UP y otros grupos afines “la reacción ha avanzado lo que la burócrata UP y su ala izquierdista revolucionaria ha retrocedido”. Por su parte, el gobierno, en cadena nacional, a través del propio Allende, arremetía diciendo: “es un intento deliberado, suicida, de arrastrar al país a la anarquía”. Siguiendo su discurso, y luego de nombrar a los ministros a cargo de la comisión investigadora para resolver el caso, el gobierno agrega que ésta estará también conformada por “el presidente del senado Patricio Aylwin y el general jefe de la zona de emergencia Augusto Pinochet”.

Paradojicamente estos individuos, personajes que luego se transformarían en totales enemigos de la UP, ahora eran los aliados de Allende para eliminar a los vopistas.

Fue así que los aparatos represivos del Estado se dejaron caer en diversas poblaciones decretándose zona de emergencia en Santiago. Unos días después, el 13 de junio, la policía lograba dar con el paradero de los vopistas. Tras algunos intercambios de balas entre integrantes de la VOP y carabineros, llegan a la calle Alvarado un contingente de 200 detectives, otros tantos policías, así como el regimiento de Buin con una serie de tanquetas y ametralladoras rodeando el inmueble. La totalidad del regimiento de Buin se encontraba a cargo, nada menos que de Augusto Pinochet. Se produce, entonces, un enfrentamiento intenso en donde las ráfagas de balas van para todos lados, los vopistas también se defienden lanzando cocteles molotov y bombas caseras. Finalmente, tras un largo enfrentamiento, un grupo de mujeres vopistas se entrega, los hermanos de la VOP Ronald y Arturo Rivera fallecen por las balas, mientras que otros terminan heridos y puestos bajo la disposición de la policía.

Luego de este hecho comienza el ocaso de la VOP. El gobierno de la UP realiza enormes operativos en donde caen detenidos la mayoría de sus militantes, en esto se denuncian torturas y otras vejaciones por parte de los militantes. Una curiosa venganza cometería uno de los vopistas, Heriberto Salazar “el viejo”, cuando el 16 de junio ingresó al cuartel general de investigaciones propinando disparos que mataron a un policía. Se produjo, entonces, una balacera que terminó con una explosión. Saldo final: 3 policías muertos junto con el vopista. Heriberto Salazar tenia puesta dinamita en el cuerpo y se hizo volar a la salida del cuartel.

Así terminaba la historia de las VOP. Pero con ella se había ido parte de la figura inocente del gobierno popular. Ya era posible observar como los aparatos de represión efectuaban su trabajo, y nada menos que bajo las manos de los próximos instauradores del fascismo. Esta es la paradójica alianza que terminó con la aventura de la VOP.

La VOP como expresión de una época histórica

De parte de la izquierda la VOP simplemente se olvidó, o son muy pocos los que la recuerdan. En el caso de los anarquistas, que resurgen actualmente en la región chilena después de un tiempo de silencio, existe un grupo que ha intentado reivindicar a la VOP como cercanos a la ideología anarquica. Pareciera que esta idea es errada, en tanto las raíces ideológicas de la VOP están ligadas a la de la mayoría de los grupos de esa época: la marxista-leninista, así también queda constatado en una entrevista que la VOP dio a la revista Punto Final en el año 1971. Estos grupos han creído ver la ideología anarquista en esta organización debido a su espíritu de “acción directa”. Sin embargo, estos grupos olvidan que ese espíritu no es patrimonio del anarquismo, el marxismo leninismo también ha sido insurreccional, y no por eso antiautoritario (hay muchos casos emblematicos, partiendo por la revolución rusa o cubana). Estos grupos también olvidan que acción directa no es sinónimo de acción violenta explicita, sino que significa cualquier acción en donde las comunidades realizan sus acciones de forma directa, es decir, sin ningún intermediario (gobiernos, partidos, etc). Las acciones directas, no son violentas por manifestar explicitamente esta actitud, sino porque violentan la lógica de la representación tan funcional, y que tanto defiende la democracía, el estado, los partidos y hasta los sindicatos, así como otras organizaciones que coartan la autonomía de los individuos y las comunidades.

Acercarnos a la historia de la VOP, no es tanto para reivindicarla como grupo verdaderamente revolucionario, ni hacer apología de sus acciones como más rupturistas que las del resto de experiencias antagónicas que se producían en aquella época. Nuestra historia debe ser analizada de forma global, como una totalidad y no en función de los actores que nos acomoda reivindicar. Recordar a la VOP es una oportunidad para reflexionar todo un periodo de nuestra historia.

Hablar de la VOP, en realidad es hablar de la Unidad Popular, lo cual, a la vez, es hablar de las limitaciones y potencialidades de la practica y la teoría revolucionaria. Hablar de todos estos temas, en el fondo, es hablar del problema de la emancipación, un asunto no menor.

Recordar a la VOP es visibilizar las fuertes limitaciones y contradicciones que existían en el periodo de la Unidad Popular. Contradicciones que no se reducían simplemente al binomio izquierda/derecha como nos ha repetido una historia masticada y poco reflexiva. En todos los grupos y también dentro de la “izquierda” existían una amplia gama de tensiones, que partían, en el caso de esta última, con la VOP, pero que también atravesaban a grupos miristas y socialistas radicalizados. Los campesinos y pobladores también emprendieron acciones ilegales que desbordaban al “gobierno popular”, como por ejemplo las tomas de terrenos y las corridas de cercos. Grupos obreros que entendieron la importancia de la autonomía frente a cualquier gobierno (incluso los “populares”), también generaron fuertes tensiones con la UP al conformar los cordones industriales y los comandos comunales, en las fases finales del proyecto de Allende.

Muchos podrán argumentar que la VOP estaba totalmente descontextualizada, pero yo me pregunto, si esto es así ¿no estaba acaso también descontextualizado el proyecto de la UP? ¿cómo se explica entonces su fracaso total? Más allá de seguir mistificando el proyecto del “gobierno popular”, es necesario comprender ese proceso como la consecuencia (quizás superficial) de un fenómeno mucho más amplio que guardaba relación con un ímpetu que cruzaba a gran parte de la sociedad, el cual no era patrimonio de ningún gobierno o Estado. Era algo, a mi parecer, que debe ser entendido de forma mucho más compleja y variada.

En cualquier caso, a las finales, en los momentos en que las tensiones ya no soportan más, o cuando la lucha de clases se desata, como siempre ha ocurrido en la historia, los gobiernos y Estados no hacen nada, o bien demuestran que su verdadera naturaleza nunca fue revolucionaria, sino totalmente reaccionaria. Esa es la verdad que vivieron los vopistas en 1971, verdad que un par de años después la vivieran los miristas, comunistas, pobladores, campesinos y obreros. El garrote del gobierno les vino antes o después, pero a todos al final.

11 de septiembre de 1973, día en que llegó el golpe de gracia, fecha en que todos fueron masacrados por el Estado, metamorfoseado misteriosamente, de un día para otro, de socialista a fascista.

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Nota: la información, así como las citas utilizadas en este articulo fueron extraídas del libro ”La VOP. Historia de una guerrilla olvidada en los tiempos de la Unidad Popular”. Completo libro publicado en la región chilena en 2012, el cual contiene un relato de los hechos en torno a la organización, la novela “Carne de Perro” de German Marín, así como comunicados íntegros emitidos por la VOP y otras organizaciones que constituyen una valiosa fuente directa para conocer la historia de esta organización.

http://hommodolars.org/web/spip.php?article4910