El Centro Social Okupado Palavea es un espacio para la cultura libre y las biopolíticas alternativas situado en el antiguo internado de las Oblatas, en el barrio de Palavea, Coruña. Durante años este edificio permaneció en estado de completo abandono, a merced de los buitres que convierten la vivienda en un bien con el que especular libremente amparados en unas leyes que favorecen el éxito de sus estrategias.
Hace una temporada, el espacio fue okupado por un grupo de personas procedentes de diferentes movimientos sociales de la ciudad con el objetivo de rehabilitar su ruinoso interior y utilizarlo como vivienda y como espacio donde construir otra forma de relacionarse y de concebir la realidad, donde diseñar y poner en marcha prácticas de autogestión, de comunidad y de lucha social al margen de las instituciones que comercian día a día con nuestros sueños y esperanzas destruyendo las vidas y el futuro de las personas para seguir llenando sus rebosantes arcas. Ahora, un empresario local ha comprado el edificio con el presunto objetivo de montar un asilo privado, pero sus intenciones no tienen nada que ver con un filantrópico proyecto de ayuda pública sino que sólo esconden intereses netamente lucrativos vehiculados por el cada vez mayor envejecimiento de la población en una sociedad marcada por la privatización de los servicios públicos más elementales, lo que en suma da como resultado un negocio seguro. Además, existe un interés represivo que queda al descubierto cuando la presencia de los colectivos que devolvieron la vida a ese edificio y al barrio fue aprovechada para abaratar el precio (teniendo en cuenta que Valery Karpin, ex-futbolista y actual especulador inmobiliario que perdió la propiedad en su día por no poder afrontar los pagos, había pagado inicialmente 7 miillones de €, y que el empresario de Sada que lo ha comprado ahora ha pagado sólo 1 millón al comprárselo a Nova Galicia Banco, a quienes pasó la propiedad tras perderla Karpin). Urge echarles de ahí porque fomentan otra manera de vivir, porque cuestionan lo establecido y reconfiguran sus márgenes para liberar momentos y espacios secuestrados bajo las lógicas del mercado que terminan exterminando la libertad y sometiéndonos a las directrices que nos marcan sus estructuras, las mismas que nos están arruinando bajo el pretexto de una falsa crisis que legitima la supresión de nuestra dignidad a todos los niveles.
El próximo 20 de noviembre, en un sorprendente alarde de nostalgia fascista, tendrá lugar un juicio contra las personas identificadas por su okupación del espacio, que podría ser la antesala de un desalojo y destrucción del mismo. Por eso, el próximo 20 de noviembre a las 11:35 de la mañana delante de los juzgados de A Coruña tendrá lugar una concentración de apoyo al proyecto del Centro Social Okupado Palavea. ¡VEN Y MUESTRA TU APOYO!
En el CSO Palavea se ha dado acogida a numerosos proyectos culturales, sociales y políticos. Se han hecho conciertos de grupos de todo tipo de estilos que por sus pocos recursos o por sus convicciones no encajaron en el catálogo oficial de la industria discográfica o no encuentran lugar en los locales comerciales; Se han hecho infinidad de comedores veganos con los que reunir dinero para diferentes causas; Se han dado charlas sobre toda clase de temáticas, debates y proyecciones de documentales; Se han creado numerosos talleres (yoga, reciclaje y reparación informática, percusión, guitarra, danza, fabricación de jabones, manualidades y artes plásticas, cocina vegana, artes marciales…); Se ha construido y puesto en marcha una huerta ecológica y cooperativa donde han participado muchxs vecinos y vecinas, y una rampa de skate, ciber-café y otros recursos gratuítos y a disposición de cualquiera. Estos y otros muchos proyectos han permitido superar las dificultades que los imperativos capitalistas nos ponen a la hora de recuperar nuestras vidas y nuestra autonomía, nuestra energía y nuestras ganas de seguir combatiendo sus injusticias y de seguir llenándonos con algo más que vacío y gris ciudad en un mundo cada vez más podrido y envenenado al que sólo le queda caer, derrumbarse, para que de sus escombros pueda germinar la semilla de rabia y creatividad que nos permita forjar otro mundo más necesario que imposible.
Mientras la especulación y sus estrategias chantajistas privatizan el espacio y convierten la vivienda en una propiedad privada con la que jugar como si la vida real fuese un tablero de Monopoly macabro, se protege a quienes dejan a miles de familias en la calle y se expulsa, reprime y persigue a quienes deciden, mediante la acción directa y la práctica colectiva, oponerse a esta situación y rebelarse. No esperábamos menos de un sistema genocida que lacera millones de vidas, aniquila el medio ambiente y sumerge las conciencias en las lagunas consumistas rentabilizando la frustración y los complejos de autoestima. Desalojarán, lo sabemos, tarde o temprano lo harán, pero también sabemos que la lucha no termina aquí, que esto es sólo el principio y que mientras nos quede aliento seguiremos creando espacios vivos donde algunxs sólo quieren muerte y dinero.
¡Solidaridad con lxs compañerxs del CSO Palavea!
Para leer el comunicado de la asamblea del CSO ante el juicio click aquí.