Ejército del Pueblo Paraguayo pone en primer plano lucha armada en el sur de América Latina

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n ataque murió un jefe de la policía y fueron heridos varios agentes represivos. La guerrilla destruyo varias patrulleras y se retiró sin novedades


El 23 de octubre en el departamento de Concepcion (Paraguay) un grupo armado perteneciente al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) atacó a un grupo de las fuerzas represivass y a un conocido terrateniente de este país.

En el ataque murió un jefe de la policía y fueron heridos varios agentes. La guerrilla destruyo varios vehículos de de las fuerzas policiales. En la misma acción, los rebeldes distribuyeron un panfleto en el cual reivindican dicho atentado al mismo tiempo de anunciar nuevas acciones.

La detención de tres personas cuando intentaban lanzar una bomba de estruendo al paso de la caravana narco-presidencial, agregaron elementos a la expectativa.

El primer incidente ocurrió mientras un rico ganadero residente en la ciudad de Horqueta, famosa por su pobreza, logró escapar en el vehículo en que viajaba, luego que un grupo de personas armadas dispararon contra su automóvil en un supuesto intento por detenerlo.

El individuo avisó inmediatamente a la policía que envió tres patrulleras al lugar con personal encabezado por el comisario Manuel Escurra, jefe de una unidad policial y reconocido torturador, las cuales fueron recibidas a balazos y una de ellas estalló en el camino lleno de explosivos.

202El comisario Escurra recibió un balazo en la cabeza que le costo la vida y otros suboficiales resultaron heridos en el ataque.

Posteriormente, agentes de la Fuerza Operativa de la Policía Especializada y miembros del contingente militar enviado al norte del país para combatir al EPP acudieron al lugar, pero no lograron localizar a los atacantes aunque ocuparon otros siete explosivos sin estallar.

El narco-presidente Horacio Cartes, en un recorrido por la cercana ciudad de San Lorenzo, anunció que, ante el incidente, se marcará una mayor presencia de las fuerzas armadas y policiales en Concepción, uno de los tres departamentos ya militarizados.

Reconoció que le preocupa “la constante sombra del EPP”, sin embargo, insistió en que su gobierno hace lo nunca hecho antes para tratar de neutralizar a los irregulares.

Paralelamente, tres personas carentes de documentos fueron arrestadas por el supuesto intento de lanzar bombas de estruendo al paso de la comitiva del narco-jefe de Estado, informaron agentes policíacos a la televisión local.

Los medios de prensa destacan lo ocurrido, incluyen fotos de las patrulleras destrozadas e incluso realizan críticas a lo que consideran una falta de previsión de las fuerzas militares y policiales acantonadas en el área, hasta ahora fracasadas en su objetivo. Sin embargo, no critican la enorme desigualdad social, que provoca que el pueblo se alce en armas.

LIDER DE TRABAJADORES NO DESCARTA LA VIA VIOLENTA

José Rodríguez, líder de los carperos [campesinos sin tierra que sobreviven en carpas o tiendas], aunque asegura no tener nexo alguno, no quiere opinar sobre el accionar del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo. De paso, reivindica la lucha armada.

“No quiero opinar de algo que no conozco, estaría prejuzgando, pero ninguna lucha de liberación de un pueblo es desechable”, dijo a Radio Cardinal el dirigente campesino de la Liga Nacional de Carperos, consultado sobre su opinión acerca del EPP. Aseguró que nunca visitó en la terrorífica cárcel eufemísticamente llamada “Agrupación especializada” a Alcides Oviedo Brítez, uno de los líderes del EPP. Sí visitó a su amigo el preso político del Partido Patria Libre Anastacio Mieres, falsamente condenado por el secuestro y asesinato de Cecilia Cubas [hija del ex narco-presidente de Paraguay, Raúl Cubas Grau].

Sobre el EPP, insistió, “no tengo nexos, no sé sobre su objetivo político”. Finalmente, aunque si bien dijo que queda un “margen para la lucha reivindicativa con métodos pasivos”, no se apartó de la posibilidad de tomar las armas de manera a obtener las reivindacaciones sociales buscadas.

A su criterio, el propio inicio de nuestra democracia se dio gracias a las armas, por lo que es un mecanismo necesario.

http://www.lahaine.org/index.php?p=72803