Tras varios años de tortura intencionada por el abandono sanitario al que le tenían sometido Honorio Gómez, preso anarquista en lucha en la campaña contra las torturas, ha conseguido este último año ser operado de las piedras del riñón y de la contracción de los dedos de su mano.
Tras esto y tras conseguir su expediente médico con la consiguiente lucha burocrática que supone se ha conseguido documentar los traslados ilegales a los que fue expuesto para no ser operado en numerosas ocasiones. Ha interpuesto una denuncia por torturas contra los responsables con el apoyo de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía. Entre ellos 2 subdirectores generales de la SGIP (Secretaria General de Instituciones Penitenciarias) y varios directores de prisiones y subdirectores médicos.
La ultima información es que el Juzgado de Instrucción de Madrid donde se interpuso la denuncia ha admitido a trámite la denuncia por tortura y prevaricación. Considera el juzgado que los hechos presentan características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal por lo que ha incoado diligencias previas y ordenando la práctica de varias diligencias de prueba solicitadas en la denuncia. El juez ha solicitado oír en declaración al preso, que sufre varias enfermedades, y ha pedido a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias que remita copia de los expedientes de traslado desde el año 1998.
Desde la asamblea de grupos de apoyo de la campaña contra las torturas en prisión hemos estado apoyando al compañero en esta lucha contra la tortura médica y, mas allá de que no creamos en su justicia, vemos necesario difundir por todos los canales posibles esta denuncia ya que visibiliza la realidad de abandono sanitario existente en las cárceles y como puede ser usada la desasistencia médica como castigo contra quienes luchan dentro.
Tras varios años de tortura intencionada por el abandono sanitario al que le tenían sometido Honorio Gómez, preso anarquista en lucha en la campaña contra las torturas, ha conseguido este último año ser operado de las piedras del riñón y de la contracción de los dedos de su mano.
Tras esto y tras conseguir su expediente médico con la consiguiente lucha burocrática que supone se ha conseguido documentar los traslados ilegales a los que fue expuesto para no ser operado en numerosas ocasiones. Ha interpuesto una denuncia por torturas contra los responsables con el apoyo de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía. Entre ellos 2 subdirectores generales de la SGIP (Secretaria General de Instituciones Penitenciarias) y varios directores de prisiones y subdirectores médicos.