Este martes centenares de personas han vuelto a manifestarse por las calles del barrio barcelonés de Sants para mostrar su rechazo al desalojo y derrumbe del centro social Can Vies, considerado un referente de la cultura popular y que permanecía abierto desde hacía 17 años.

El lunes al mediodía, el Ayuntamiento de Barcelona desplegó un amplio dispositivo policial para desalojar el edificio. Desde entonces, se han multiplicado las muestras de solidaridad vecinal y resistencia a través de manifestaciones y disturbios.

Durante la jornada de este martes, y por segunda noche consecutiva, se han vuelto a montar barricadas en las calles y se han visto arder contenedores.

Un grupo de manifestantes ha prendido fuego a la máquina excavadora que se está utilizando para derribar el centro. También se han quemado varios contenedores de la plaza y de la calle de Sants, que han obligado a cortar el tráfico.

Antes de los incidentes, unas 500 personas se estaban manifestando en protesta por el cierre y derribo de Can Vies con la complicidad de decenas de vecinos que se asoman a los balcones con cacerolas y para aplaudirles.

Al grito de ‘Si tocan Can Vies nos tocan a todas’ o ‘Barrio combativo’, los manifestantes han recorrido las calles de la zona ante la mirada atenta de numerosos agentes de la policía, que finalmente han cargado contra ellos provocando heridos graves que han tenido que ser hospitalizados.

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