Desde el 27 hasta el 31 de agosto haremos de la okupación un tema de debate.
¡Vamos a compartir juntos nuestras experiencias, debatir, tomar las calles, y que comience la acción!
Las razones para okupar son muchas y diversas: protestar contra los crecientes alquileres; evitar que se derrumben edificios; cubrir la necesidad de establecer espacios anticomerciales y autogestionados; construir centros sociales para hacer talleres de arte, bicis, serigrafía, para vivir, y un largo etcétera.
Las casas a nuestro alrededor están vacías.
Mucha gente duerme en casas de amigxs o en habitaciones pagando un precio altísimo, en la calle, en parques, bajo puentes, en casas de acogida, en albergues, en fábricas abandonadas, etc.
El coste de la vida sube, los barrios tienen que encarar procesos de gentrificación, los espacios alternativos están en peligro, y aunque algunos han resistido, otros se han perdido. Hay suficientes razones, por tanto, para entrar en inmuebles que estén vacíos como para no dejarse desahuciar.
El hecho de llenar esos vacíos otra vez con vida, de darles uso a esos espacios nos da la posibilidad de vivir una vida mas autogestionada. Las casas okupadas pueden ser un lugar para vivir la utopía, así como aquella vida que escogemos, ser un espacio de trabajo o reunión para grupos e iniciativas, un intento de cooperar juntos para el ensayo y error, o intentar dar respuesta a los problemas conocidos y por conocer.
Se acostumbra a entender las okupaciones como ataques a la situación política, como símbolos contra las políticas capitalistas existentes en relación a la vivienda con tal de así conectar la lucha por sus casas con la lucha por una vida mas digna.
¿Pero cómo podemos augmentar las posibilidades de éxito cuando se okupa? ¿Cuáles son los motivos que nos impiden okupar las casas? ¿Y cómo llevamos a la práctica nuestras ideas con tal de hacerlas realidad?
Cuando encontramos intereses comunes y aprendemos de nuestras experiencias podemos evitar cometer muchos errores, y así inspirar y ayudarnos lxs unxs a lxs otrxs. Juntxs podemos enfrentarnos a nustros miedos y levantarnos contra la criminalización y la represión.
Muévete!
Asumiendo nuestras diferencias y contradicciones, en nuestras formas de luchar, vivir y debatir, los Squatting Days serán una oportunidad para beneficiarnos de todo esto. Queda mucho por aprender, debatir, cuestionar y muchas experiencias por vivir.
Mostrándolo a través de publicaciones de décadas pasadas, leyendo libros o viendo películas, en conversaciones con personas de distintos contextos, el movimento okupa estará presente en toda su extensión.
Esperamos impacientes la posibilidad de analizar la okupación tanto teóricamente como a la práctica con todas las personas implicadas en este proceso. Actitudes o compartimientos autoritarios tales como el racismo, sexismo, homofobia o antisemitismo, bajo nuestra forma de entender, están claramente contra el diálogo constructivo sobre relaciones sociales y no tendrán cabida aquí. Queremos un proceso solidario con estrategias y conceptos para ponerlos en práctica. Tejer una red para mantener el contacto y así establecer vínculos fuertes y duraderos para construir algo juntxs.
El sábado 30 de agosoto será el “action day” en Hamburgo, así como en cualquier otro sítio, ¡empezad algo!
¡Vamos!
Os animamos a comenzar el debate ahora mismo. Nos encantaría recibir textos, informes, preguntas, ideas, contribuciones surgidas de debates ya sean individuales o de grupos o proyectos. Escribe, graba videos o programas de radio, y enviánoslos a squattingdays [at] riseup [dot] net. (public PGP-key en squattingdays.noblogs.org) y pubicalos via indymedia o otros canales. Usar vuestra estancia en los Squatting Days en Hamburgo para establecer contactos, realizar talleres, extender el conocimiento.
No importa si has vivido o actualmente vives en una casa okupada, si tienes o no experiencia okupando casas, si te gustan las fiestas en edificios abandonados, si estás bajo amenaza de desalojo o en campaña por el derecho a la vivienda, estás buscando casa o has empezado a interesarte en casas vacías y las posibilidades de su uso alternativo.
¡Ven a Hamburgo!