Acaban de cumplirse ocho años del montaje policial conocido como “caso 4F”.

Después de una farsa de juicio en el cual sólo se admitió la corrupta versión policial, donde no se investigaron denuncias de torturas, donde las instituciones barcelonesas y catalanas fueron cómplices de esta mentira… se condenaba a Rodrigo Lanza a cuatro años y medio de prisión, a otros dos compañeros a más de tres años y a Patricia Heras a tres años de cárcel.

Patricia Heras, inocente, víctima de este asqueroso montaje, decidió quitarse la vida cuando había cumplido seis meses de su condena… prefirió morir, antes que volver a la cárcel. Va para ella, en especial, el recuerdo en una fecha que ninguno de nosotr@s olvidaremos jamás.

“Absolución”

He ahorcado a mi inocencia.

Su orgullo adolecido aún voraz no impide que se mee encima,

su belleza efímera,

expira con los últimos latidos suplicantes.

Perdida entre flujos corporales viscosos y detritos.

La he visto patalear rabiosa e indefensa hasta morir,

parecía más humana que yo,

en su rostro desfigurado leo un pánico sumiso y crudo

que me arde entre las piernas…

Le he cortado el cuello a mi ilusión,

la colgué de un semáforo ciego

y vi cómo se desangraba incrédula,

borboteando nerviosa,

vi el dolor brillar muy cerca,

se fue apagando velado tras su mísero destino.

Abro la caja y está vacía.

Poema de Patricia Heras