El montaje de la “mano negra“, hace más de un siglo. El caso Scala. No olvidamos lo que pasaron quienes sufrieron el intento de montaje terrorista tras el desalojo del C.S.O. Malas Pulgas, y lo que hubo que luchar para que dejaran en paz a la gente. No ignoramos todos lo montajes que han sufrido en Euskadi, y que el ministerio del interior es el ventrílocuo de sus patéticos muñecos humanos, también llamados periodistas.

Si piensas que la policía y l@s jueces/zas son terroristas, van a por tí. ¿Que hay 809 imputad@s en una operación contra la corrupción, incluyendo policías, guardias civiles, funcionari@s divers@s, directores de bancos…? Aquí no pasa nada, eso no tiene “interés mediático”. La “operación Eladio” van a guardarla en un cajón, ahora tienen que salvar a la (…) infanta, y si pueden, crear “alarma social” (que no es un delito, según quien la cree, claro): ultras, musulmanes, anarquistas… todos son enemigos de la “ciudadanía”, todo es lo mismo. Patronal, polític@s, represores/as, jueces, periodistas… es@s sí que son buenísimos, claro. Si Cuba, Hamas o quien determinen, son terroristas, será según convenga. Marruecos, que está más cerca, no es un estado terrorista, ni ninguna dictadura, es un paraiso, claro.

En “La caja de Pandora y el cajón de sastre del antiterrorismo español“, l@s compas ya hicieron un acertado análisis, recordando también lo que han sufrido l@s compas por parte del estado italiano.

Ampliando dicho artículo, no podemos olvidar el montaje “caso bombas” que sufrieron l@s compas en Chile, o la “operación cenizas“, que sufrieron en Bélgica. Tod@s absuelt@s, pero las detenciones, los registros policiales con toda clase de abusos, ahí quedan, impunes.

En el estado español tenemos que un grupo de facebook puede ser un grupo terrorista, con la misma dinámica que se sufre siempre: registro de locales, detenciones de madrugada con encapuchad@s armad@s… Es el caso de l@s 5 de Sabadell.

La “operación trócola” fue más de lo mismo, y tampoco olvidamos a Francisco y Mónica. Estos tres últimos casos aún están ahí, y lo peor es que Francisco y Mónica siguen pres@s.

No siempre los montajes judiciales y policiales caen por su propio peso, muchas veces hay que luchar, y mucho. La cuestión es cuanto más tiempo vamos a aguantar “la misma historia”, es decir, que nos gobiernen, que nos juzguen, que nos agredan, que nos detengan de madrugada mientras l@s verdader@s terroristas se siguen forrando día a día a nuestra costa. Si sólo nos rebelamos un@s poc@s, poco lograremos. Es necesario, ahora, no más que nunca, sino como siempre, una verdadera lucha autoorganizada y antiautoritaria. Las leyes nos intentarán machacar, siempre fue así. Pero si somos anarquistas, nuestra única meta, y nuestro único límite, es la libertad. Saquemos a est@s 7 compañer@s de prisión… pero que la lucha siga. Sin votar, formándonos, practicando el apoyo mutuo y la autogestión, pensando y actuando.

 

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