Jornadas Febrero Feminista 2015 “Transfeminismos que corren”
ENTREVISTA DE FEBRERO FEMINISTA AL COLECTIVO DE APOYO A MUJERES PRESAS EN ARAGÓN (CAMPA)
Febrero Feminista (FF).- ¿Qué es CAMPA y qué objetivos os habéis marcado en estos primeros momentos de andadura?
CAMPA (C).- CAMPA es un colectivo de apoyo a mujeres presas en Aragón. Conscientes de que en la cárcel se reproducen, de manera mucho más agresiva que en la vida cotidiana, un sin fin de discriminaciones y lógicas antidemocráticas, decidimos crear un grupo de trabajo asambleario donde abordar todas estas problemáticas para trasladarlas a la opinión pública. Además, creemos que las mujeres presas están doblemente estigmatizadas y mucho más invisibilizadas que los hombres por lo queremos centrar nuestros esfuerzos en apoyar y dar a conocer sus diversas realidades.
FF.- ¿Qué motivos o motivaciones os han llevado a crear este colectivo y qué gentes lo componéis?
C.- Desde la desaparición de ASAPA, la Asociación de Seguimiento y Apoyo a Presos y Presas en Aragón (colectivo que ha realizado un importante trabajo en los últimos años), vimos necesario coger su relevo para no abandonar la denuncia de un colectivo que creemos necesita de la solidaridad del resto de la población. Por otro lado, nos dimos cuenta de la ausencia de investigación sobre las mujeres presas en Aragón por lo que decidimos darle un enfoque de género a nuestra labor ya que la cárcel es un espacio totalmente machista, diseñado por y para los hombres.
La solidaridad y el apoyo desde fuera, tanto a las presas como sus familiares, son nuestras principales motivaciones. Primero, para que no si sientan tan aisladas y segundo para desestigmatizar el paso por prisión de cara a la sociedad. Hace unos años decir que ibas a ser desauhciado era una vergüenza, ahora, gracias al trabajo de mucha gente y la concienciación de los ciudadanos hablarlo y luchar junto a otros ha evitado que multitud de personas se vean en la calle. No hay que tener miedo a decir que has estado presa, o que tienes dentro a familiares o amigos, desbaratar el silencio mediático y social al respecto ayuda a que una vez cumplida la condena, la vuelta a la vida sea más sencilla.
Por otro lado, creemos que es muy importante deslegitimar el sistema carcelario poco a poco ya que el instrumento punitivo estatal actual es totalmente deficitario. Empezar como mínimo a decir que existen otras alternativas, mucho más funcionales que ya están jugando un papel muy importante en la reforma del campo penitenciario como la intervención comunitaria y la justicia popular. No somos partidarias de fomentar una sociedad que privilegia a ciertos sectores de la población (que son, en general, los que sustentan el poder y nos han conducido a la precarización de la existencia) a costa de una mayoría sometida a este sistema desigual que etiqueta a determinados sectores de la sociedad como enemigos a los que hay que castigar e incluso, en último término, destruir. Pese a que nos cueste imaginar otro tipo de solución a los conflictos que la actual, ello se debe, no a una imposibilidad de alternativas sino a un tipo de educación concreta en un sistema concreto que, como pone en evidencia el panorama político actual, es necesario transformar. Y podemos afirmar sin titubear que, dentro del espectro de la sociedad que deseamos, la cárcel no es la solución en la mayoría de los casos, por no decir en ninguno.
Teniendo en cuenta que el sistema carcelario sigue vigente hoy en día, entendemos que el apoyo mutuo y la crítica a este tipo de instituciones es esencial. Consideramos que todas y todos somos actualmente un blanco en potencia de las lógicas de castigo, así lo demuestran normativas como la Ley Mordaza y, en general, la criminalización de la precariedad, puesto que ya no se penaliza a ciertos individuos sino a cierto tipo de colectivos sociales.
En cuanto a las que lo formamos, somos un grupo de mujeres asambleario que no representamos a ningún otro colectivo previo, aunque hemos participado en movimientos sociales antes. Y, por supuesto, estamos abiertas nuevas colaboraciones.
FF.- ¿Os habéis planteado trabajar coordinadamente con otros colectivos de Aragón o del Estado que trabajan el tema de la cultura punitiva o las prisiones (Coordinadora contra la Tortura, Cárcel=Tortura, Marcha a Zuera, etc.)?
C.- Sí, consideramos fundamental la unión de luchas. Estamos en comunicación y coordinación con algunos de sus proyectos. Participaremos ya en la Marcha a Zuera y estamos en contacto con Cárcel=Tortura.
FF.- ¿Qué referencias estatales tenéis sobre el tema de la prisión y el género? Autoras, estudios, colectivos… ¿Por qué esta interseccionalidad concreta?
C.- Hay que destacar que en la actualidad contamos con un, aunque valioso, escaso material teórico y práctico concretado en las mujeres presas. Dentro de este material, son muy interesantes los colectivos Cárcel=Tortura, Milentas o el informe de Salhaketa “Mujeres en prisión. Voces dentro del Centro Penitenciario de Pamplona”.
Precisamente nos resulta sorprendente (pero no casual) la escasez de investigación de esta problemática cuando somos el país de Europa con mayor población penitenciaria de mujeres. Es un hecho que, institucional y socialmente, la mujer está mucho más abandonada dentro del sistema carcelario, y qué decir si le sumamos otras condiciones como la clase o la raza. En los últimos 30 años, las presas han pasado de 480 a 5.117, según Instituciones Penitenciarias. Suponen el 7,6% del total de personas encarceladas. La media europea de encarcelación femenina está en el 5,3%. Dentro de estas estadísticas se afirma que la droga y las vidas marcadas por abusos se esconden detrás de muchas de las mujeres que delinquen en el Estado español, según abogadas y expertas.
FF.- ¿Podéis hacer un resumen general del panorama actual de la situación de mujeres presas en Aragón y que peculiaridades tienen las mujeres con respecto al funcionamiento de las cárceles y las condenas?
C.- Sólo existen tres cárceles específicas para mujeres en todo el Estado español lo que supone que el 82,2% de ellas estén reclusas en módulos de Centros Penitenciarios mixtos en los que se convierten en una minoría desatendida. En Zuera existen 14 módulos y solo uno es para mujeres, que es obligatoriamente de respeto (no pueden estar con sus hijos o hijas, deben de acatar unas normas mucho más estrictas, donde les hacen dividirse por grupos, compitiendo entre ellas y asumiendo el rol de funcionarios). Sin embargo, los hombres se encuentran divididos por módulos en función del grado en el que estén cuando las mujeres están todas juntas. Dependiendo del delito que cometas no puedes cumplir la condena en tu zona cuando contamos con una macrocárcel que debería abarcar a todo tipo de población.
Recientemente hemos conocido el caso de una presa en Zuera que ha sido trasladada a la cárcel de Brieva (Ávila) tras denunciar varias palizas por parte de funcionarios. Ello ha conllevado a graves perjuicios en su contra, como el aumento al primer grado y el consecuente alejamiento de su familia. Hay que hacer un seguimiento de estos casos, sacarlos a la luz, hacer presión y conseguir que se haga justicia, al menos lo que gran parte de la población entenderíamos por justicia. En este caso lo primero es que vuelva a su localidad.
FF.- Vemos que tenéis dos actividades programadas dentro de las jornadas de Febrero Feminista 2015 ¿Por qué habéis enmarcado esto en la lucha feminista?
C.- Como mencionamos al principio la cárcel no está adaptada a las mujeres y además las presas están doblemente condenadas, porque generalmente son las responsables de los cuidados de sus familias (que luego no suelen recibir de vuelta cuando cumplen condena) lo que las hace sentirse doblemente culpables. Entendemos el feminismo como una lucha contra las discriminaciones, y los derechos de las presas, precarias o putas que generalmente suelen ser los más vulnerados.
FF.- Si queréis comentar algo más este es vuestro espacio…
Esperamos que contacten con nosotras y poder crear una red de comunicación, apoyo social y confianza que dé el primer paso para acabar con el aislamiento carcelario. Tenemos un correo electrónico de contacto campazgz@gmail.com y un blog donde vamos publicando las actividades que realizamos https://campazgz.wordpress.com/.