Cuando ya se ha cumplido el tiempo de plazo investigativo, y estamos a la espera de la fecha para audiencia de Javier Pino y Natalia Collado, como grupo cercano hemos querido escribir estas palabras con el objetivo de informar y dar a conocer cómo se ha llevado el caso de nuestras hermanas, acusadas de quemar un bus del transantiago hace tres meses atrás.
LOS HECHOS
En la madrugada del pasado 7 de abril, en la esquina de las calles Ecuador y Concon, ubicada en la comuna de Estación Central, la escena de una micro transantiago, recorrido 210 ardiendo en llamas interrumpía la oscuridad mientras el fuego la consumía por completo.
Minutos más tarde Natalia Collado (Tato) y Javier Pino son detenidas en calle Alameda, afuera de la Usach, en un control de detención donde son señaladas como sujetas sospechosas que coincidían con las supuestas descripciones ya dadas por el chofer del bus, quien comenzado el incendio, llama inmediatamente a carabineros.
Cuando son llevadas a la 21 comisaría de Estación Central, el chofer dice reconocerlas, quienes supuestamente suben al bus sin pagar en la esquina de Alameda con Cumming dejando una mochila en los asientos traseros antes de bajar por la última puerta. Tato y Javier son trasladadas a la BIPE, donde son obligadas a dar muestras de ADN ante la resistencia de las dos. Ya afuera del lugar comenzamos a reunirnos familiares, compañeras y amigas cercanas para conocer la situación y dar muestras de cariño a ambas. También, y como es habitual, la prensa comenzó a aparecer con su espectáculo conocido para exponer los rostros de nuestras hermanas en las cámaras de televisión. Cuando por la mañana son trasladadas a tribunales, las imágenes logran captar sus miradas en alto, mientras Javier grataba “Abajo la sociedad patriarcal y antropocentrista”.
Luego del control de detención, el tribunal amplió la detención por 3 días a la espera de más antecedentes. En la audiencia realizada días después, se presentó como principal prueba la declaración del chofer que dice reconocerlas. Además, se descarta la posibilidad de que el incendio haya sido ocasionado por fallas eléctricas y se cree que pueden haber utilizado algún acelerante. El juez a cargo las formaliza por Tenencia y colocación de artefacto incendiario en transporte público, bajo la ley de control de armas, dando 90 días de plazo investigativo que deben cumplirse en prisión preventiva. La intendencia quiso querellarse pero hasta el momento no hay nada concreto al respecto.
Javier fue llevado al módulo 11 de la Cárcel Santiago 1, mientras Tato fue trasladada a la cárcel de mujeres de San Miguel, donde permanece unos días aislada antes de llegar al módulo de connotación pública.
Natalia Collado y Javier Pino
Desde un principio Tato y Javier manifestaron sus posturas de vida, reconociéndose en confrontación cotidiana con la forma de vivir impuesta por la civilización, defendiendo los sentires que desde el corazón afloran cuando se decide romper con la monotonía social.
Sin pretender un posicionamiento desde la culpabilidad o la inocencia de los cargos imputados, ambas reivindican sus vidas como una práctica de desprecio y deconstrucción de las lógicas sociales, asumiendo que vivimos en un mundo patriarcal, antropocéntrico, autoritario, especista, y por lo tanto, merece todo el desprecio de quienes creen que la vida es mucho más que cemento.
Hay quienes se atreven a construir nuevas formas de relacionarse, aunque cueste errores y aciertos, desde el amor por la naturaleza, y en constante cuestionamiento a los valores morales aprendidos desde niñxs. Porque cada decisión que pareciera inofensiva, como la alimentación, empatizando con la tierra y las diversas seres que en ella habitan, el respeto cotidiano con el medio ambiente, la difícil deconstrucción del patriarcado desde las profundidades de las relaciones, el decidir no ir a un hospital, autogestionar la vida, buscar nuevas formas de aprendizaje, por mencionar algunas cosas, no son prácticas que convivan pasivamente con el orden social.
Es por eso que aún estando encerradxs tras los fríos muros de la cárcel, sus corazones siguen latiendo al pulso indómito de la naturaleza. Desde el primer momento se han mantenido firmes, pero sin subestimar el impacto que genera la prisión. Es importante señalar que las dos están en contextos carcelarios muy distintos.
Para Javier su alimentación ha sido difícil ya que antes de su detención se encontraba alimentándose sin productos refinados y potencialmente con crudos. En Santiago 1 este tipo de alimentos no se pueden ingresar, debiendo ceder a comer ciertas comidas, aunque sin dejar de ser veganx. Además, ha conservado su pelo largo a pesar del constante hostigamiento por parte de gendarmería. También es importante señalar que ha podido tener acceso a algunas actividades “recreativas”, por ejemplo jugar a la pelota, o a pesar de la lentitud de los trámites, le fue posible ingresar materiales para tallar madera dentro del módulo.
Tato por su parte tiene acceso a comidas preparadas pudiendo ingresarle más variedad de alimentos. En un principio estuvo compartiendo módulo con la compañera Tamara Sol Farías Vergara, pero luego esta última fue trasladada y ahora comparte celda con Nataly Casanova. Las condiciones carcelarias son distintas ya que se le han podido ingresar materiales como lanas, mostacillas, palillos, croqueras para dibujar o variada lectura.
Han sido difíciles meses cuando ya se cumplió el plazo investigativo y la monotonía de la cárcel pareciera que hace más lento el tiempo. Durante el proceso de prisión preventiva Javier y Tato han manifestado sus sentires por medio de palabras públicas, además de su constante apañe con otrxs compas en prisión por medio de ayunos o comunicados. Han tenido que enfrentarse a los duros fantasmas del encierro debiendo reafirmar sus convicciones, surgiendo nuevos cuestionamientos, reflexiones y sentires.
Luego de más de dos meses desde su detención, tuvieron la instancia de una visita intrapenitenciaria que debiese repetirse una vez al mes según la evaluación de conducta que determine gendarmería.
Situación legal
El día viernes 26 de junio se realizó una sorpresiva audiencia donde se oficializó el cambio de defensora pública, quien además comunicó que los compañerxs no estaban colaborando con la investigación.
Como resultado de esta audiencia se le permitió a Javier el ingreso de frutos secos y suplementos alimenticios. Además, les concedieron una visita en conjunto con su nueva abogada, que se realizó en los calabozos después de la audiencia, con una duración de cinco minutos. Y para finalizar, le permitieron a Javier tener visita con un médico ya que lleva cerca de dos meses con una costilla fisurada que no habían querido atenderle en enfermería.
Cuando llevaban cerca de dos meses en prisión preventiva, Tato y Javier tuvieron acceso a la carpeta investigativa donde se presentaban las pruebas en su contra. La declaración del chofer hasta ese momento era la única prueba que sostenía la causa, sin embargo, faltaban los peritajes a las ropas, las revisiones de las cámaras, entre otras cosas.
A pesar de la situación judicial y los constantes roces con ambas abogadas, las compañeras están tranquilas esperando que den fecha para la próxima audiencia.
Por el momento, los tratos con gendarmería si bien han sido hostiles, Tato y Javier han sabido sostenerse cotidianamente, junto con el apoyo se sus seres queridxs. En un principio eran vigiladas de forma especial ya que estaban catalogadas como presxs con riesgo de fuga, pero con los días esto fue bajando. Aún así la convivencia con lxs pacxs siempre será difícil, ya que ninguna está dispuesta a ceder o agachar la cabeza ante los malos tratos.
Desde afuera apoyamos a nuestras hermanas con el corazón lleno de amor y con la certeza de que el aullido de la manada traspasa cualquier muro. Por eso, unidxs por la afinidad cómplice, solidarizamos con Javier Pino y Natalia Collado. Fortaleciendo los lazos, en constante crecimiento y aprendizaje nos hermanamos con más fuerza para que cada gesto de cariño sea un poquito de calor que llegue a sus corazones este invierno.
A la espera de la fecha de la próxima audiencia, enviamos todo el amor a nuestras hermanas
JAVIER Y TATO A LA KALLE!!!
Grupo de compañeras y amigas.