“Nosotros florecemos, cuajamos bombas para la revolución social, por la liberación
íntegra del proletariado, de la humanidad en el comunismo anárquico. Ved, hermano,
he aquí una, de mecha crepitante, es de papel, tinta y dinamita cerebral, ¡estalla!…”
– Armando Triviño, Santiago, 1919
Dentro de los últimos años han surgido una gran cantidad de proyectos de difusión y edición independiente ligados a las ideas antiautoritarias. Entre estos proyectos destacan varios nombres y título, pero específicamente en esta ocasión quisimos hablar con Ediciones Crimental, editorial independiente y anarquista que ha tenido un trabajo constante y metódico durante los últimos años, llevando la propaganda anarquista a diversos espacios e instancias.
¿Podrías contarme a rasgos generales en qué consiste el proyecto de Ediciones Crimental?
Ediciones Crimental nace como idea a finales del 2009 y comienza a materializarse en el 2010, surge principalmente con el propósito de seguir aportando con el trabajo de varios compas que tenían pequeñas experiencias editoriales o que movían ferias de fanzines fotocopiados.
A nosotros tiempo atrás nos costaba mucho encontrar material o literatura anárquica y revolucionaria y la poca que había estaba como siempre reservada a la gente con dinero, por lo tanto o quedaba el robo o tener buena suerte en los libros usados.
Otra de nuestras motivaciones era un poco la nostalgia del oficio en si y también la trayectoria de organización y difusión en la historia del rubro propagandista gráfico y editorial. Por lo tanto como no sabíamos casi nada de edición de textos empezamos a averiguar y los pocos compas que conocíamos en ese momento que hacían libros nos tendieron una mano guiándonos en ese proceso.
A partir de ahí nuestro interés personal creció y también la experiencia, comenzando a mover más títulos y abasteciendo nuestra feria itinerante que hoy en día se mueve en actividades de casi todo tipo.
¿Cuál es la principal motivación que lleva a levantar un proyecto de difusión antiautoritario? ¿Qué importancia tiene para ti el desarrollo de este tipo de iniciativas?
Pienso que las motivaciones para la acción siempre viene de una plano individual principalmente, revisando en lo que es bueno o con lo que se tiene a mano para aportar en el momento, siempre las conversaciones con personas afines y no tanto ayudan a hacerse una perspectiva de lo que falta en cada territorio donde se quiera parar una iniciativa anárquica y la propaganda siempre es un paso y un arma para ir desarmando las caricaturas que hace el poder sobre nosotros/as y difundiendo las propuestas y praxis creativas y destructivas que tengamos o a las que pongamos énfasis, por lo tanto es al final de cuentas ver para lo que uno es bueno y qué es lo que falta en el lugar donde me desenvuelvo… Creo que así nacen muchas iniciativas en todo ámbito de cosas y como en todas se necesita perseverancia, ser porfiado y fijarse grandes ambiciones, para que dure en el tiempo o mute nutriendo otras propuestas y sobre todo ser autocrítico, entendiendo que los tiempos van mutando cosas y situaciones y no caer en que lo que uno hace es mas valorable o mejor que las demás iniciativas, organizativas, de difusión, culturales, educativas, estratégicas, de acción y un infinito etc..
Dentro de los títulos que ha publicado Ediciones Crimental ¿Qué tipo de criterios llevan a la selección de los textos a editar y publicar? ¿Existe alguna tendencia definible dentro de Crimental?
Lo primero que pensamos cuando empezamos era en no editar títulos ya disponibles, eso necesita un conocimiento de más o menos los títulos que se manejan dentro de las editoriales agitadoras, para no repetirlo e ir nutriendo y fomentando los proyectos afines. En nuestros criterios subjetivos está el hecho de que tengan un lenguaje “universal” y accesible sin muchas o mayores tecnicidades, también en los que sin importar el contexto de origen del escrito se puedan extrapolar a la realidad en la que nos desenvolvemos y sacar lecciones y que sintamos que puedan aportar algo a las discusiones o incluso crearlas.
Desde el punto de vista de Ediciones Crimental,¿Cómo ves la situación actual del movimiento anarquista? ¿Cómo crees que se ha desarrollado en la última década?
Independiente del frente en el que uno esté aportando a la lucha, creemos que la discusión colectiva y el análisis deben realizarse periódicamente dentro de lo que se podría considerar como el “movimiento antiautoritario” o dentro de cualquier tendencia que se diga a sí misma revolucionaria. Hay que tener opinión, pero con altura de miras y no simplemente que se quede en el berrinche anti-todo o en el comentario de pasillo o en el cahuín de conventillo, tiene que darse desde una perspectiva constructiva y enriquecedora, sin negar las posturas irreconciliables que puedan haber, creo que en la actualidad a nuestro entender falta mucho más involucramiento en la vida de los explotados, tener opinión y acción en lo que nos sucede en el cotidiano, tanto en la pega como en el barrio o también en nuestra intimidad o en nuestra forma de pensar, ir cuestionándonos en conjunto y de manera constructiva, no siendo actores pasivos o con la arrogancia de creer que por manejar más conceptos se está por encima del común.
Como anarquistas, creo que hay que incidir en todos los aspectos de la vida, tanto públicos como privados, llevando nuestra crítica y nuestras propuestas a todos lados porque se necesitan de todos los frentes parar derrotar a nuestros enemigos de clase con todas sus alienaciones.
También tenemos una increíble incapacidad de generar infraestructura y medios que estén a la altura de las circunstancias, en muchos casos dependiendo de terceros, ajenos o que sólo pretenden utilizarnos.
Pensamos que la lucha también tiene que darse contra ese sectarismo en el que caen muchas tendencias, que independientemente cual sea, resta herramientas a todos los demás, volviéndolas una caricatura y anulándolas, siendo que muchas veces hay muchos aportes escondidos ahí en la palestra para ser utilizados y no se toman por prejuicios o incluso cahuines, facilitando inclusive el camino a la represión.
Tenemos que contribuir a la creación de redes, orgánicas, federaciones, asambleas, etc. que sean capaces de responder con contundencia los ataques desde el poder tanto a nosotros como “movimiento” y también a nosotros mismos como explotados e ir creando en el aquí y en el ahora ese mundo nuevo que queremos.
Durante los últimos años se ha realizado en Santiago la feria del libro y la propaganda anarquista ¿Cómo ha sido tu experiencia dentro de esta instancia?
Es una instancia en la que participamos activamente y que se viene realizando hace 4 años, tiene la gracia de congregar a muchas editoriales afines y fomentar su trabajo, como también a muchas tendencias dentro del anarquismo y facilitar el cambio de perspectivas y discusiones o por lo menos hace un gran intento en ese sentido, no creemos que la feria sea un mercadito alternativo de cultura, si no más bien una apuesta por sacar las ideas de su propio círculo o ponerlas a disposición de los interesados/as siempre tratando de realizarla en lugares populares y con historial combativo para que pueda ir todo tipo de gente, como también dar tribuna a todos los que quieran participar con su proyecto que en parte se ha logrado viendo la cantidad de personas que convoca a la instancia, tanto a realizar la actividad o solamente asistir.
Creo que como siempre falta pulir muchas cosas, sobre todo con lo que respecta a infraestructura autónoma y la manera de tratar de integrar todas las discusiones para que no se dejen pasar por alto, pero creo que es lo que nos guía para seguir manteniéndose en el tiempo, para poner ese aprendizaje en práctica e ir lográndola cada año de una mejor manera, sacando la A fuera del circulito que muchas veces se encuentra.
Como Ediciones Crimental existen varias editoriales que se han levantado en los últimos años ¿Qué opinión te merece este suceso de florecimiento de proyectos de difusión? ¿Alguna crítica que quisiera realizar al respecto?
Me parece algo muy valorable y fomentable, de hecho siempre que podemos tratamos de hacerlo, ayudando a compas que están partiendo en esto, pasándole manos o contándoles cómo la hemos hecho hasta el momento y no morir en el intento.
Mientras más haya más rico se torna la cantidad de ideas disponibles, pero hay que tener en cuenta no caer en generar un mundillo del libro alternativo anarquista, de no generar los mismos vicios que los circuitos burgueses de cultura, sacando títulos o cosas sólo por las ganancias que dan o sólo apareciendo cuando se puede hacer “dinero seguro” y que tampoco sea recuperable por el mismo capital que convierte las ideas en algo académico o especializado, pero limitado en su llegada y accionar.
No podemos sólo sacar libros, tenemos que fomentar la acción y esto es algo que no nos cansaremos de repetir, no queremos ser una alternativa cultural, queremos la destrucción de este mundo de miserias y la construcción de uno liberador y creado desde abajo. Los libros sólo son una pequeña herramienta de las miles a disposición.
Por Mate Amargo