Sin lugar a dudas el mejor titulo dentro de la trilogía en “De Memoria”. Un libro cargado de memoria, resistencia y subversión, conceptos básicos para quien pretenda enfrentar la miseria del Estado-Capital.
Después de huir de la España franquista, tras la detención de Salvador Puig Antich, lxs compañerxs se reagrupan en el exterior -tal y como lo tenían previsto antes de la caída del camarada en Barcelona- y coordinan la resistencia bajo las siglas G.A.R.I, pero esta vez, asumiendo su compromiso ferreo con lxs presxs politicxs del Interior (España). La idea central de esta coordinación, la cual agrupa a diversos colectivos insurreccionales, será desestabilizar al régimen franquista con ataques que mermen en distintas formas (económica, moral, física e incluso psicologicamente) a la dictadura de Francisco Franco, ademas de representar un apoyo directo a lxs compañerxs -de distintas tendencias- encarceladxs en las prisiones del Caudillo (incluso varixs de ellxs corríendo el peligro de ser ejecutadxs por los delitos que se les imputaban).
La desenfrenada carrera comenzó con un traspié importante: Salvador muere en el Garrote Vil el 2 de Marzo de 1974. El ultimo prisionero ejecutado de esta manera por el fascismo español y compañero de armas para varios miembros de los G.A.R.I. El golpe desmoralizador fue contundente, pero tanto el autor como sus compañerxs, sabían que Salvador no era el único y no podían abandonar a lxs demás camaradas -no importando si les conociesen o no-, pues la suerte de Salvador, seguía siendo la misma suerte para varixs prisionerxs. Así y todo, se prepara el secuestro del Director del Banco de Bilbao para que por primera vez haga aparición la coordinadora que tendrá en tan solo 1 año, a toda Europa patas arriba y tensionada con respecto a las relaciones que se mantenían con el régimen franquista.
Países como Bélgica, Alemania, Italia y sobre todo Francia, serán el lugar donde esta poderosa agrupación dejara su huella imborrable bajo atentados explosivos, carros-bombas, amenazas, voladuras de torres de alta tensión, destrucción de puentes, sucursales de aerolíneas ibéricas, ferrocarriles que conectaban con España, puestos aduaneros, cruces fronterizos, bancos españoles, entre los distintos objetivos que se expandieran por Europa y que representaran a los intereses de la España a combatir.
El esfuerzo fue monumental (así queda de manifiesto en estas paginas), pero el resultado no pudo ser mas sorpresivo. La alegría para el movimiento revolucionario se vería plasmada en una consigna que lxs anarquistas conocemos muy bien: ¡Libertad a lxs presxs politicxs!, mas la suerte individual que correrían varios miembros de los G.A.R.I., no dejara indiferente a nadie.
Por: Biblioteca Autónoma Sante Geronimo Caserio