Desde la cárcel de máxima seguridad del Estado capitalista chileno, se
fugan estas letras para llegar dignas y alegres a los luchadores sociales,
a los que resisten, a los que sueñan con una sociedad más justa y mejor, y
por supuesto a los peñis que luchan allá en la hermosa Araucanía.
El año 2007 el Estado opresor echó a andar su bestial maquinaria de
montajes, represión y hostigamiento aquí en la capital, en Valparaíso y la
Araucanía culpandonos de asaltos y asesinato, a mí y a otros compañeros.
En mi caso, seis años duró esa persecusión (2007-2013) donde en el
territorio Mapuche se intensificó la militarización y allanamientos, en
ese tiempo difícil, fueron asesinados por efectivos de carabineros Matías
Catrileio, el peñi Mendoza Collío y Rodrigo Melinao. Para mí, fueron seis
años de clandestinidad, de insumisión, de resistencia activa y vital en la
cual nació mi hijo Alen (hoy de 4 años), fiel testimonio de ternura y
resistencia.
Hoy la trinchera de lucha son estos muros, barrotes y cámaras, desde aquí
mi posición anticapitalista sigue sin fisuras, sin quiebres.En estos días
intensos he sentido la solidaridad de ese pueblo que resiste y que ha
venido a calmar mi tristeza, y dándome un abrazo fraterno y cariñoso me
reconoció como uno de los suyos.
Y con esa fuerza seguiré resistiendo, ya que vengo de los bosques
milenarios, vengo de la sonrisa hermosa de mi hija Ayelen, vengo también
del frío y la desigualdad, vengo del sufrimiento y del hambre en
dictadura, vengo del llanto de los niños cuando allanan sus comunidades,
vengo de la lágrima de la mamita que llora a su hijo asesinado, vengo de
la Araucanía y de la tierra recuperada, vengo del corazón de los más
pobres…
¡¡¡Territorio y Autonomía a la Nación Mapuche!!!
¡¡¡Libertad a todos los presos políticos!!!
¡¡MARRYCHIWEU!!
Carlos Gutierrez Quiduleo
Diciembre 2013