Fue dentro del contexto de hace algunos meses en los cuales las sucesivas bombas puestas en elementos fundamentales para seguir manteniendo la explotación y dominación capitalista amenazaban con multiplicarse(*) , que ocurrio el asalto a una sucursal del Banco Security. En dicha ocasion resulto muerto un funcionario de la represion estatal, el cabo moyano quien equipado para el enfrentamiento, con arma de servicio y en moto disparo sobre los que huian. Fallo y entonces recibió respuesta.
Los medios de comunicacion y el Estado no demoraron mucho en acusar a ex presos politicos de dicha accion, cuestionando los beneficios otorgados a estos luego de arduas movilizaciones y recalcando la actitud critica que estos mantienen ante el sistema capitalista apoyados por material audiovisual difundido en la prensa. Esto ultimo es el eje central del montaje, queriendo asimilar la figura de la “delincuencia” con el pasado politico de los supuestos implicados y la posicion critica al sistema de explotacion.
Es probable que debido a la captura de Freddy Fuentevilla y Marcelo Villarroel en San Martin de los Andes se vuelva a poner sobre el tapete el “debate” respecto a endurecer los castigos contra quienes hayan cometido “crimenes politicos”, pero mas aun, es la lucha directa (o necesidad impuesta para sobrevivir) contra quienes controlan la economía, la política, los medios y la violencia la que se transforma en un lenguaje que aspira a tornar la acción y voluntad transformadora de las relaciones capitalistas como “crimen común” y por tanto devenir en accion violenta estatal “a priori” sobre potenciales “delincuentes”.
No lloramos porque nos tilden de delincuentes, solo levantamos la voz para que nuestra clase no caiga en esa trampa.
Es necesario apoyar a los compañeros acusados, pues sean o no realmente quienes hayan participado de la expropiacion al banco, es vital para una conciencia anticapitalista dar cuenta que el único crimen es el que a diarios nos tiene sometido el régimen de explotación, que nos violenta y nos expropia nuestras energías físicas y mentales para luego esperar que consumamos lo que producimos y así producir mas ganancia para ellos.
Es nuestra posibilidad no solo de acusar un montaje, sino poner en cuestionamiento sus leyes hechas a pedido de quienes no tienen problemas en mandar matones para acabar con huelgas o dejar familias enteras en la miseria.
(*) Nos referimos a los atentados contra bancos ( que mediante la esclavitud en deudas nos obligan a gran parte de nuestra clase a verse obligados a someterse a cualquier explotación con tal de no ser rematados sus ya deplorables viviendas), centros de pago (que con el aval del Estado cobran por satisfacer nuestras necesidades y el que no, les da igual privarles de algún bien necesario) camiserías (los encargados de ejecutar las leyes que hacen los políticos que llegan al senado con ayuda de los dineros de las mismas empresas que después les facilitaran sus ganancias) o Iglesias (espacios de ilusiones que hacen mas tolerable el sufrimiento, culpándonos por nuestra desgracia y no al explotador)
Expulsan a Marcelo Villarroel y Freddy Fuentevilla
Hoy día, Miércoles 19 de Marzo, el embajador Maira anunció que serán expulsados en los próximos días los compañeros detenidos en Argentina Marcelo Villarroel y Freddy Fuentevilla, acusados de asesinar al cabo Moyano el pasado mes de Octubre en un asalto a un banco Security en el centro.
La acción de expulsar a los combativos compañeros fue una gestión sumamente rápida por parte del Ministerio del Interior y el embajador argentino, ya que por lo general son trámites de carácter extensos y burocráticos. A los compañeros se les expulsará sin derecho a apelación aparentemente, ya que exigían asilo político, y de una forma netamente fascista. El Estado chileno no duda ni por un segundo agilizar las gestiones para traer a los compañeros al país y así otorgarles el presidio perpetuo calificado (cadena perpetua) que considera 40 años de cárcel sin beneficios carcelarios que es la condena que exige el Ministro del Interior, pero sí dudan y tramitan a los miles de chilenos con el tema del Transantiago, que dicen que es una solución a largo plazo, al igual como debería ser un proceso de expulsión o extradición. Una vez más queda demostrado de que en “democracia” como lo llama la Concerta$ión a este modelo político, es más importante encarcelar a luchadores sociales que resolver los problemas reales de la gente, que importa más la vida de un policía que su trabajo es reprimir a diestra y siniestra, que el asesinato a trabajadores, estudiantes y jóvenes mapuches por parte de Carabineros.
A realizar actos de solidaridad con los compañeros presos y con cualquier persona encarcelada por luchar contra este sistema represivo que no le importa nada la vida de la gente, sino que de personas adherentes a instituciones reguladas o del mismo Estado, y que su política de “cambio” es callar todo tipo de rebelión popular.
Comunicado público: Marcelo Villarroel Sepúlveda y Freddy Fuentevilla Saa
A los pueblos que habitan Chile, Argentina y el mundo. A todos los que luchan por la libertad, felicidad y dignidad de los pobres.
Marcelo Villarroel Sepúlveda y Freddy Fuentevilla Saa actualmente recluidos en Junín de Los Andes y David Cid Aedo recluido en Zapala, todos en la provincia de Neuquén, patagonia argentina, comunicamos:
1.- Marcelo y Freddy llegamos a territorio argentino el jueves 13 de marzo y después de encontrarnos con David, arribamos a la ciudad de San Martín de Los Andes el viernes 14 del presente en horas de la tarde. En el transcurso de la noche nos dirigimos a un pub restorant con la idea de alimentarnos y tomar algo para reponernos. Al intentar ingresar, la guardia de este lugar al escuchar nuestro acento chileno, nos profirió insultos claramente xenófobos, que nos invitaban a dejar el lugar. Al momento de darnos vueltas e intentar marcharnos fuimos agredidos por la espalda por casi 10 individuos, que después supimos era personal militar de civil, y al instante reducidios por personal policial local que se encontraba en el lugar. Fuimos trasladados a la 23 comisaría de la Policía Provincial donde nuevamente se nos agredió insistentemente durante la noche.
En ningún momento esgrimimos armamento frente a alguien, nunca amenazamos a nadie, pues no tuvimos tiempo de reaccionar y menos andábamos bajo la influencia del alcohol. Es más en la comisaría exigimos que se nos practicara un examen toxicológico o alcoholemia y sólo se nos respondió con golpes y más golpes. Hoy todo esto es materia de investigación por parte de la justicia provincial argentina.
2.- El motivo esencial por el cual nos trasladamos a territorio argentino fue y sigue siendo, salvaguardar nuestras vidas puesto que nuestro real delito es ser reconocidos luchadores sociales, combatientes populares y miristas.
Desde noviembre recién pasado se nos acusa de haber participado en el asalto a un banco y en un posterior enfrentamiento con Carabineros, resultando uno herido y otro muerto.
Hemos sido condenados a muerte por el general director de dicha institución, Gral Bernales, con la anuencia y complicidad del poder político y los medios de información. Se han dicho y publicado infinidad de farsas y mentiras flagrantes, constituyendo quizás unos de los montajes mediático policiales más descarados de los últimos años. La finalidad: reprimir con un ejemplo drástico la protesta social y rebeldía popular que crece imparable por diferentes y bastos (sic) lugares de chile.
3.- En estos días de encierro hemos recibido el amor, cariño y compromiso de mucha gente sin fronteras, nuestra historia de lucha habla pos sí solas: represión en dictadura, cárcel y tortura a nuestras familias, prisión política en democracia, hermanos, hermanos, compañeros caídos, hasta hoy perseguidos…, Nada de los que ha dicho y dice el Estado, sus policías y su prensa servil tiene el respeto de los que luchan… puesto que nuestros sueños no caben en sus cárceles.