Han pasado cuatro días en los que no dejamos de acumular rabia y estupor ante lo que está ocurriendo. Han pasado cuatro días desde que la policía detuvo adecenas de compañeras en Madrid, Barcelona y Palencia. Ahora 5 de esas personas permanecen en prisión preventiva. Son acusadas de terrorismo por ser anarquistas. Su objetivo es infundir miedo entre las personas que quieren organizarse independientemente, y que por ello escapan a su control.
Han pasado cuatro días desde que diferentes centros sociales okupados fueron registrados, el CS(r)OA La Quimera de Lavapiés, la 13-14 Okupada en Madrid y La Redonda en Granada. Además de diferentes domicilios en Madrid, Palencia, Grandad y Barcelona. Pudimos ver cómo la policía nacional reventaba puertas, como se llevaba ordenadores, cuadernos y dinero. Cuando registran un Centro Social Okupado y Autogestionado están atacando a todos los proyectos y colectivos que participan en él para crear alternativas de vida y trabajo en común. Están buscando atemorizar a quien participa de ellos queriendo imaginar otras formas de relacionarse, pensar, crear y convivir.
Personas desde los movimientos sociales en todo el Estado español mostraron su solidaridad saliendo a la calle el lunes por la tarde y ayer miércoles en protesta contra la brutal represión sufrida. Como consecuencia, seis personas más fueron detenidas y otras muchas fueron identificadas, apaleadas.
Ahora es Piñata, antes fue Pandora, y toda una larga lista de montajes policiales que no buscan la seguridad de la población, buscan convencer a la opinión pública de que las personas que contestan a las políticas que nos condenan a una vida de miseria son peligrosas. Esto es algo común en cualquier sistema que trata de aumentar el control social mediante leyes represivas e injustas como el código penal o la recientemente aprobada Ley mordaza. Si no existen terroristas, se inventan para destruir a base de golpes y cárcel el empeño de las gentes que se organizan para hacer sus vidas más vivibles, para encontrarse y generar espacios críticos desde los que transformar la sociedad.
¿Quizá porque ya no saben cómo desviar la atención de su corrupción de sus cajas B, sus sobres, sus pelotazos urbanísticos? ¿Quizá porque quieren que dejemos de preocuparnos por la miles de personas que dejan en la calle a diario mientras rescatan a los grandes bancos?
Su propuesta de vida es el trabajo asalariado como esclavitud, la vivienda inaccesible como bien de mercado y no de uso, jerarquías de género para apuntalar el sistema de empobrecimiento y la ley y el orden como métodos de imposición de miedo y aislamiento obligatorio, con el objetivo de acallar las voces que quieran señalar la injusticia y a los responsables que nos condenan a ella.
La nuestra: seguir tejiendo redes de solidaridad y apoyo mutuo, darle vida espacios que llevan vacíos décadas, contestar sus miserias desde la autoorganización, los espacios seguros, la apuesta por lo colectivo, el trabajo en un barrio que no se conforma, donde las redes se activan y responden cada vez que nos tocan a alguna de todas nosotras.
Nosotras seguimos aquí, La Quimera vive y vamos a seguir construyendo barrio, vamos a seguir cuidando de nuestro huerto, abriendo la biblioteca y la tienda de ropa gratis, haciendo asambleas, talleres, charlas, conciertos…construyendo desde la autoorganización la mejor respuesta a sus mordazas.
Frente a la represión, solidaridad.
Por la libertad de lxs presxs anarquistas. No estáis solxs.
Tomemos las calles
Manifestación 12 de Abril a las 12h plaza de España- Sol
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