Volante repartido en las movilizaciones producidas en Lima en defensa del Valle del Tambo contra el proyecto minero Tía María (Perú)

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VALLE DEL TAMBO ¡RESISTE!
Yo también soy terrorista anti minero
Victoriano Huayna
Henry Checlla
¡Presentes!
¿Quién los mato? El Estado opresor
¿Quién los vengará? Su pueblo
¿Cómo? Creando, forjando Revolución Social

Frente a los últimos sucesos de represión contra la población del Valle del Tambo en Islay – Arequipa.

1. Nuestra entera solidaridad con la justa lucha de la población del Valle del Tambo que, aprendiendo de las distintas experiencias de lucha por la tierra y contra el Capital, comprenden claramente que la actividad minera es perjudicial para su salud, la de sus hijos y de los que vendrán. Comprenden también que los principales beneficiados de esta actividad son las empresas transnacionales, que lejos de beneficiar la zona de influencia la han empobrecido y la han contaminado a tal punto de que es imposible sobrevivir a través de las actividades primarias de la zona, principalmente agrícola.

2. Rechazo del Proyecto en Consulta Popular. Si bien el proyecto fue rechazado (2009), el Estado y el empresariado persisten en imponerlo a sangre y fuego. Hecho que se demuestra en los más de 5 muertos que han dejado los enfrentamientos y la resistencia de la población arequipeña que con coraje y dignidad sabrá vencer. Dado el rechazo de la población consideramos que la única solución posible es la cancelación del Proyecto Tía María, por los datos técnicos y sociales que indican lo perjudicial que será.

3. Rechazamos rotundamente la militarización de la zona a cargo de los 2000 militares y los más de 5000 policías, todos muy bien armados (con armas letales), a pesar de que el ejecutivo lo niegue. Demostrando, una vez más, que no se defiende a ningún pueblo sino al empresariado.

4. Los medios de comunicación masiva (El Comercio, Correo, Frecuencia Latina, América tv, Panamericana) han mostrado nuevamente que son tan cómplices del empresariado y de la policía al colaborar en la criminalización de la población que resiste legítimamente en una guerra entre piedras contra tanques. A todos estos actores les consideramos nuestros enemigos y serán tratados como tales.

5. Como anarquistas, apostamos por la libre organización y auto determinación de las diferentes comunidades y poblaciones. Sabemos que a pesar que detrás de estas protestas hay algunos personajes con intereses individuales (partidarios, económicos, políticos) ajenos a la reivindicación colectiva, no desmerece para nada la solidaridad que se da entre distintas organizaciones sociales, que en la lucha se encuentran y se cohesionan. Por todo esto creemos se deben seguir tejiendo resistencias, construyendo puentes y continuar entendiendo que todas las luchas tienen causas comunes, que la pobreza, la contaminación y la represión tiene un solo origen y que los responsables de todo lo que está sucediendo tienen nombres y apellidos.

6. Solidaridad activa. Por último llamamos a que la solidaridad desborde los límites bajo los cuales el Estado pretende mantener su monopolio de la violencia, solo ellos pueden ejercer la violencia, estigmatizando a quienes nos defendemos como terroristas anti mineros.
Toda acción es útil: un lienzo, una carta, un corte de calle. Y es casi obvio que si ellos nos reciben con balas no podemos devolverles flores.

¡Sería un acto de cobardía supremo rechazar la acción para la cual nosotrxs pusimos la primera semilla!
Anarquistas en Lima